Despedidos siete vigilantes de seguridad en Zamora

Comisiones Obreras denuncia que la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León quiere dejar sin protección y vigilancia privada después de más de treinta años a los centros de la Universidad Laboral de Zamora y el Centro Integrado de FP (Ciudad de Zamora) dejando en la calle a siete vigilantes de seguridad.

Desde el sindicato recuerdan que estas dos instalaciones son de una gran extensión, están integrados en complejos educativos deportivos con pabellones deportivos y campos de fútbol donde se celebran competiciones deportivas. Además, añaden, "se emplea como plataforma de aterrizaje de los servicios de transporte de emergencia del Sacyl y en el interior de estos complejos están ubicados una estación meteorológica y el Centro de Formación del Profesorado e Innovación". En total, suman junto con sus edificios y zonas comunes una superficie de más de 40.000 metros cuadrados, de ahí su "importancia para la vigilancia y protección por riesgo de intrusión", a juicio de CCOO.

"En una reunión mantenida con la Delegada Territorial y el Director Provincial de Educación, con la intención de encontrar alguna respuesta de alivio, proponiendo incluso por la parte social otras posibilidades, su respuesta ha sido que es una decisión tomada por la Junta y que como tal, nada pueden hacer al respecto", explican.

Por todo ello, desde el comité de la empresa Vasbe (UGT, USO Y CCOO) "no entienden que la Junta quiera ahorrar el presupuesto", en el personal de seguridad, "cuando el poder de disuasión y reacción de esta figura ante cualquier amenaza lo hace en un elemento insustituible", concluyen.

¿Vigilante de seguridad y medidores de ruido para evitar las fiestas?

Este verano el Ayuntamiento de Madrid aprobará la nueva normativa para regular los pisos turísticos de la capital, según ha podido saber Invertia. Una normativa en la que lleva trabajando desde el mes de febrero y contará con propuestas de algunas plataformas que van encaminadas a evitar conflictos con los vecinos. Entre ellas, que haya vigilantes de seguridad para evitar las fiestas.

“El Ayuntamiento trabaja en una nueva ordenanza con el objeto de regular con claridad los apartamentos y viviendas de uso turístico, en un marco de seguridad jurídica, de equilibrio y de respeto a la convivencia vecinal”, señalan fuentes del consistorio a este periódico. 

Así, el consistorio se ha estado reuniendo con diversas plataformas y han analizado “todas las propuestas para hacer una ordenanza completa que tenga en cuenta a todos”. Una de estas es Madrid Aloja, plataforma que aglutina a 3.500 Viviendas de Uso Turístico (VUT), y que ha presentado una batería de medidas para regular el sector, muchas de las cuales estarán contempladas en el texto final que verá la luz este verano. 

Entre ellas, la plataforma propone acotar el número de nuevas viviendas turísticas hasta el 40% de los pisos que alberga un edificio y la creación de un depósito de garantía proporcional al número de huéspedes. Esta última medida, de carácter disuasorio, surge “para evitar las fiestas ilegales”, asegura Adolfo Meras, presidente de Madrid Aloja.

Asimismo, el alquiler vacacional plantea la instalación de sistemas de controles de ruido y vigilante nocturno para garantizar el descanso de todos, el acceso digital -sin llave física- al inmueble o la creación de la Oficina de Servicio de Mediación y Convivencia para que los vecinos se sientan escuchados y atendidos. Esa última medida, de carácter disuasorio, con total probabilidad estará dentro de la nueva normativa, según afirman desde la plataforma. 

También quieren combatir la sobreocupación, fijando un límite en el número de huéspedes por vivienda para acabar con los problemas originados por su acumulación e imponiendo sanciones a las plataformas que recojan anuncios con ocupaciones por encima de las permitidas. 

En este plan están trabajando todas las áreas implicadas, “porque no es un problema sólo urbanístico, sino de seguridad, de medioambiente, de turismo, etc.”, cuentan desde el Ayuntamiento a Invertia. 

Antigua normativa

Se calcula que hay cerca de 10.000 viviendas de esta tipología en Madrid, cifra que estaba aumentando en los últimos años hasta que llegó la Covid. De hecho, durante estos años fueron fuente de conflicto entre vecinos y huéspedes. De ahí que el anterior consistorio quisiera frenar las licencias. 

De hecho, en la actualidad está en vigor el Plan Especial de Hospedaje que se aprobó en la anterior legislatura de Manuela Carmena. Una normativa que desde sus inicios ha generado mucha polémica. “Este plan se ha demostrado ineficaz para resolver el problema pues no sólo no han dejado de aumentar las VUT sino que son más difíciles de controlar al haberlas introducido en el mercado negro”, reconocen fuentes del Ayuntamiento. 

Entre las medidas más polémicas, el consistorio de Carmena fijó cupos en la concesión de licencias permitiendo el alquiler de viviendas de particulares durante un tope máximo que no podrá llegar a los 90 días al año.

El sector calculó que con esta medida se ilegalizaría el 95% de las viviendas de la capital por lo que se interpusieron hasta quince recursos contra el plan. Sin embargo, en febrero de este año el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) respaldó el plan. 

No obstante, desde el consistorio que dirige José Luis Martínez-Almeida abogan ahora por una ordenanza que establezca “los instrumentos que permitan canalizar y dar solución a las posibles molestias que se produzcan, junto a un régimen sancionador específico, que el plan en vigor no contempló”. 

En este caso, las plataformas de viviendas turísticas también están a favor de la nueva normativa. Explican que el trato con el actual consistorio es “exigente” y “cordial”, pero que “no hay ánimo prohibicionista como en el anterior gobierno”. 

Plan turístico de Madrid

A las puertas del verano, Madrid Aloja defiende reforzar el diálogo y ampliar el consenso ente los distintos actores a través de un pacto sectorial que incremente la competitividad de nuestro país frente a otros destinos. Todo ello para crear una oferta de alquiler vacacional centrada en la sostenibilidad y la calidad, en línea con el Plan Estratégico de Turismo 2020-2023 puesto en marcha por el consistorio madrileño.

Dicho plan pretende incrementar el gasto medio diario por turista en un 40%, pasando de los 270 euros de gasto antes de la pandemia hasta los 375 euros, así como elevar la estancia media turística en la ciudad hasta las tres noches antes de 2030. 

Vigilantes para la comisaría de El Vendrell

La situación de las indisposiciones que sufren los agentes de  la Policía Local de El Vendrell en las noches de los fines de semana y de impiden organizar patrullas de vigilancia, motiva también que el Ayuntamiento tenga que contratar a vigilantes privados para custodiar la comisaría durante las noches.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado la situación. Señala que «Durante toda la semana pasada, El Vendrell ha estado sin agentes en los turnos de noche». Sólo había dos vigilantes de seguridad contratados por el Consistorio para vigilar la comisaría.

Esa falta de policías durante las noches entre semana se suma a la  ausencia desde hace un mes de agentes durante el fin de semana para los turnos de noche ya que no hay voluntarios y coinciden indisposiciones y bajas  médicas.

Desde el Ayuntamiento evitan valorar la situación ni tampoco si podrían tomar medidas disciplinarias que obligasen a un servicio mínimo para garantizar la seguridad de los ciudadanos. De momento lo único que ha hecho el consistorio es entender que realmente son bajas justificadas.

Preocupación
La situación sin embargo preocupa a los ciudadanos que consideran que la situación deja vulnerable al municipio, aunque en caso de necesidad puede llamarse al teléfono de emergencia 112 para dar a viso a los Mossos d’Esquadra.

Según el CSIF, el pasado fin de semana sólo pudieron trabajar dos patrullas de mañana y dos de tarde. Fue para los turnos de noche que tuvieron que contratarse a dos vigilantes de seguridad.

Esas bajas por estrés principalmente que argumentan los policías coincide con una protesta laboral por lo que consideran falta de personal, elevado interinaje, condiciones laborales «y la falta de soluciones por parte del Ayuntamiento».

De momento no parece que pueda haber un acercamiento próximo por lo que ciudadanos y comercios temen que pueda repercutir en la seguridad en el municipio y más cuando llega una época de gran afluencia de personas de segunda residencia. Una situación que se une a la creciente conflictividad tras el final del estado de alarma. 

Los sindicatos denuncian la no convocatoria de plazas de oferta pública de agente de policía desde 2011 y un interinaje en la plantilla que llega al 30 por ciento de la plantilla (22 agentes) y que temen que siga aumentando «ya que, los interinos, a falta de oferta pública optan por opositar en otros lugares y, conforme van aprobando, se van yendo. También agentes de carrera, por carencia de proyecto, prueban en otros ayuntamientos».

Perros pastores alemanes vigilarán las líneas más conflictivas de guaguas en Las Palmas de Gran Canaria

Securitas pone a prueba el empleo de dos patrullas caninas, como en Barcelona

El Vicepresidente del Cabildo y Consejero de Obras Públicas, Infraestructuras, Transporte y Movilidad, Miguel Ángel Pérez del Pino, presentó ayer la nueva Unidad Canina de las Estaciones que velará por la seguridad en el transporte público, de forma especial, en las líneas con más incidentes.

Durante los meses de junio y julio se va a realizar una prueba piloto en los intercambiadores de San Telmo y Santa Catalina. Dos vigilantes caninos, y sus respectivos guías de la empresa Securitas, van a reforzar la seguridad en las principales estaciones de la isla. Las dos patrullas caninas, formadas por dos pastores alemanes machos llamados Oakley y Cero, se relevarán en distintos turnos de 8 horas diarias.

En la segunda fase se incorporará la seguridad embarcada, habrá vigilantes de seguridad especializados a bordo en las líneas más proclives a sufrir incidentes en determinadas fechas del año como las festividades de Halloween, Navidad o carnavales, informó ayer el gabinete insular.

La tercera fase incluirá patrullas móviles con vehículos propios que servirán de apoyo a los vigilantes que irán a bordo de las guaguas cuando se produzcan incidentes que estarán en coordinación con la Policía Nacional y Local y en los casos en los que tenga que ver actividad de la movilidad en carretera con la Guardia Civil.

Miguel Ángel Pérez del Pino subrayó ayer en la presentación que “la seguridad en el Transporte de Gran Canaria es una prioridad para que los ciudadanos puedan viajar con total tranquilidad en las guaguas y también para que los conductores puedan desempeñar su trabajo con total seguridad y sin preocupaciones». «Este operativo en la calle nos va a permitir actuar de manera rápida y coordinada con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y va a dotar de confianza y seguridad el uso del transporte público reforzando la movilidad en Gran Canaria, una de las líneas de actuación principales de la Consejería de Obras Públicas, Infraestructuras, Transporte y Movilidad”, agregó el vicepresidente del Cabildo. En la presentación del proyecto piloto el Vicepresidente ha estado acompañado por el Director de la Unidad Canina del Metro de Barcelona, Andrés Sancho Bailera, que va a supervisar la implantación de la nueva modalidad de seguridad con perros en Gran Canaria.

Piden un vigilante ante las agresiones verbales

Los dos médicos, dos enfermeros, el celador y el residente que habitualmente conforman el turno de guardia en el centro de salud Nuestra Señora de la Paz de San Juan Aznalfarache viven noche tras noche con «miedo» a que suceda algo grave ante los incesantes episodios de violencia verbal al que se ven sometidos por los usuarios de este ambulatorio. Este panorama les lleva a reiterar su reclamación de un vigilante de seguridad 24 horas en dichas instalaciones.

Algunos médicos del más de medio centenar de profesionales que componen la plantilla de este centro de salud se han puesto en contacto con ABC y han recordado que ya han dado traslado de esta situación de inseguridad a la Delegación Territorial de Salud y a su distrito sanitario, pero no han recibido respuesta alguna.

Las agresiones verbales se repiten a diario. «Se ha pasado de los aplausos», en referencia a las muestras de gratitud a los sanitarios durante el coronavirus, «a los insultos», lamentan.

Entre la Esquina del Gato y la comisaría

Es frecuente que el centro de salud, cerca de la Esquina del Gato, una zona de San Juan muy deteriorada y castigada por el tráfico de drogas, sea lugar de altercados entre sanitarios y usuarios, quienes proliferan insultos y amenazas contra los médicos. El último episodio fue la tarde del miércoles. Pero el más grave se produjo días antes y de madrugada.

Una doctora, una enfermera y una celadora tuvieron que ceder al chantaje de un toxicómano habitual y recetarle lo que quería para evitar más problemas después de protagonizar otro episodio de violencia verbal. Fue necesaria la presencia de la Policía Nacional, cuya comisaría está cerca.

Los sanitarios, ante el miedo a represalias y cansados de la situación, ya ni denuncian, por lo que estos delincuentes vuelven a sus andadas. De hecho, este individuo no dejó de deambular por los alrededores del centro de salud toda la madrugada. Por fortuna, los agentes no dejaron de patrullar por la zona.

«Tiene que suceder una desgracia para contar con un vigilante de seguridad», advierten. No descartan evidenciar este panorama con alguna protesta, aunque se muestran resignados. «Todos los centros de salud conflictivos tienen seguridad», añaden a este respecto. Y aseguran que el de San Juan, que lleva esperando una ampliación desde hace un año, lo es.

Robo en el hotel cinco estrellas: "¿Se han llevado un Sorolla?

La Galería Lorenart cierra una convulsa muestra en el hotel Miguel Ángel de Madrid que ha terminado con cuatro obras sustraídas. La Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía ya las está buscando

Un vigilante con mascarilla oscura va y vuelve sobre sus pasos en el vestíbulo del hotel Miguel Ángel, un lujoso cinco estrellas de Madrid. Varias trabajadoras comentan en corrillo apostadas sobre el mostrador. El establecimiento de entrada imponente y suelos de mármol está conmocionado por un robo a plena luz del día: un hombre, según la denuncia presentada por el hotel, con una "bolsa opaca" sustrajo el domingo de una muestra de arte situada en un semisótano tres pinturas y una escultura. Pasó inadvertido a los galeristas, a los trabajadores de la recepción y al guardia de seguridad de la entrada. En el hotel, 24 horas después del robo, reina el desconcierto y se impone el silencio. Uno de los cuadros sería del pintor valenciano Joaquín Sorolla.

El acceso a la exposición, pese a lo sucedido, no requiere ninguna medida de seguridad y dentro de la sala, lo suficientemente grande para que desde la entrada no se tenga una vista panorámica, no hay ningún vigilante. Los visitantes deambulan entre las pinturas y las lámparas de araña, ajenos a que ese fue el escenario de un robo.

El asunto ya está en manos de la Jefatura de la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional tras una denuncia del hotel y de la Galería Lorenart, distinguida por tener la colección más extensa del escultor vasco Jorge Oteiza y un buen número de obras de la Escuela de Madrid.

La Policía se personó en el hotel a las 20 horas del domingo tras el aviso del personal de seguridad y visionaron las cámaras. Las obras sustraídas estarían valoradas en 340.000 euros, aunque ni los agentes ni los galeristas quieren hablar con la prensa. "Voy a llamar a seguridad", llega a amenazar, nerviosa, una de las mujeres que atiende a posibles compradores.

A los pies de las escaleras que conducen a la exposición empieza un espectáculo de obras de autores contemporáneos famosísimos cuyos cuadros ocupan las más prestigiosas galerías de arte del mundo. A la derecha un Marc Chagall, casi escondido, trazo grueso y negro; un poco más allá dos Sorolla bien iluminados, la pincelada inconfundible; un Miró; dos estudios de Pablo Picasso; un retrato del hiperrealista castellano Antonio López...

Hay posibles restos del robo: entre los cuadros se ven huecosos, blancos donde hace unos días –tal vez el domingo antes del hurto– había pinturas, aunque no se sabe a ciencia cierta si corresponden a las obras compradas por coleccionistas o robadas. Entre las 200 obras expuestas hay cuadros de Menchu Gal, Antonio Saura u Óscar Domínguez.

"No nos permiten hablar", admite el vigilante de seguridad que camina por el hall. Se quita de encima el asunto asegurando que él no estaba allí cuando se produjo el robo y ya no cuenta nada más. No es la primera vez que el establecimiento de lujo deja sus instalaciones a la galería Lorenart para exhibir su colección. Ya lo hizo en 2020. La entrada a la exposición es gratuita. Este lunes era la última oportunidad para verla y un nutrido grupo de aficionados al arte de apariencia aburguesada apura las horas.

A Mati, una mujer de grandes gafas de sol y pelo rojo a cuyas raíces le asoman las canas, se queda perpleja con la noticia. "¿Se han llevado un Sorolla? No me digas. Aquí hay obras muy potentes". En la muestra sigue expuesta 'Las Chulas', 'Vestal romana' y 'Río Tajo, Río Toledo' del pintor valenciano, cuya casa-museo se halla casualmente a una manzana del hotel. Ana y Silvia también acaban de salir de la exposición. "La verdad es que no había ningún tipo de control", reflexiona la primera, a quien el vigilante ha ayudado a bajar y subir el carrito de bebé. Tampoco sabían nada pero advierten que la seguridad es "nula".

La exposición cierra sus puertas cuando pasan las nueve de la noche con el susto todavía en el cuerpo y muchas preguntas sobre el paradero de las obras de arte. La Policía ya las está buscando.

«Por enfrentarse a piratas en Somalia, 2.800 euros al mes»

                                          Ataque por piratas en Somalia

Soy la mujer de un vigilante de seguridad que trabaja en los atuneros en Somalia. Su trabajo es con armamento militar: vela por la seguridad ante los ataques de piratas. Cuando empezó, hace unos ocho años, estaban con la empresa Segur Ibérica y quebró. ¿Por qué las mejores empresas de seguridad no cogieron este servicio? Tengo la respuesta: porque hay una reclamación conjunta de todos los vigilantes por lo que les debe Segur Ibérica. El trabajo consiste en cuatro meses en Somalia por 2.800 euros al mes, y dos meses en casa pagando 900 euros que les descuentan de las nóminas cuando están trabajando. Es decir, mi marido parece un autónomo que se paga su propia nómina. Para colmo, les descuentan en la nómina como si fueran marineros, pero sin los derechos que tienen estos para jubilarse. Cuando fue el secuestro del Alakrana, Segur Ibérica pagaba a cada vigilante 6.000 euros y fueron bajando hasta 2.800. Ahora están con una empresa de Palma de Mallorca llamada Trablisa. Al principio iban cuatro vigilantes por atunero, bajaron a tres y ahora solo dos vigilantes por barco. Esto es una inseguridad para los vigilantes y para el atunero. Los patrones pagan muy bien por cada vigilante y la empresa paga lo mínimo. Doy ánimo a todos los vigilantes que, al igual que mi marido, tienen que separarse de la familia y estar en un sinvivir. Para este trabajo tienes que tener la cabeza muy bien amueblada, hace unos años un vigilante perdió la cabeza y mató al jefe de equipo y después se suicidó. Que les paguen lo que les corresponde, los que quedan son exmilitares con conocimiento sobre armamento y han participado en misiones internacionales. 

Un vigilante de seguridad de ILUNION, distinguido por evitar la agresión a un sanitario de urgencias

Otro de sus profesionales ha sido reconocido por su buen hacer en la protección de las vacunas contra la covid-19 y siete más por su profesionalidad e iniciativa

Un vigilante de seguridad de ILUNION ha sido distinguido con una mención honorífica por haber evitado la agresión a un sanitario del servicio de urgencias del Hospital de Alta Resolución Valle del Guadiato, ubicado en la provincia de Córdoba, de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir, perteneciente a la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía.

Según informó ILUNION en una nota de prensa, los hechos que han dado lugar a esta mención ocurrieron el pasado 8 de marzo, cuando un paciente muy conflictivo y violento quiso arremeter contra el sanitario que le estaba atendiendo en urgencias. La actuación de Juan F. Luque, que redujo al atacante de forma efectiva, fue “decisiva” para evitar la agresión.
Asimismo, su compañero David Gómez, quien trabaja en el Hospital de Alta Resolución de Puente de Genil, también en Córdoba, ha sido distinguido a su vez con una mención honorífica de ‘tipo B’ por su iniciativa profesional y permanente colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Se trata de “un referente en la prestación de sus servicios como vigilante de seguridad” para sus compañeros y el propio personal sanitario del centro hospitalario en el que trabaja, señala la resolución de su mención honorífica.

Estos dos profesionales trabajan en sendos centros de la Agencia Sanitaria Alto Guadalquivir, perteneciente a la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía. Ambos recogieron sus respectivas menciones honoríficas en un acto que tuvo lugar el pasado 26 de mayo.

PROTECCIÓN DE VACUNAS

Asimismo, el jefe de ILUNION Seguridad en las Palmas de Gran Canaria, Joel Díaz, ha sido distinguido con una mención honorífica de ‘tipo B’ por su buena colaboración e interlocución con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, por su buen hacer a la hora de facilitar información para la protección de las vacunas del Covid-19 suministradas en Canarias, así como por la gestión del servicio del Centro de Acogida Migrantes Canarias (Canarias 50).
Por último, el equipo de ILUNION Seguridad adscrito a Carrefour Zaraiche y compuesto por José Antonio Dólera, director de Seguridad Delegado de este centro comercial, y los vigilantes Juan Francisco Álvarez, Fernando Conesa, Francisco Guijarro, José Manuel Collado y Joaquín Poveda, también han sido distinguidos con este reconocimiento regulado en la Orden Ministerial 318/2011, de 1 de febrero, sobre personal de seguridad privada.

Según esta normativa, la mención honorífica ‘tipo B’ se otorga por haber evitado la comisión de delitos o por actuaciones humanitarias con motivos de accidentes, siniestros o catástrofes, que superen el estricto cumplimiento de sus deberes.
Las menciones honoríficas, que se conceden desde el año 2011 y se entregan en el marco del Día de la Seguridad Privada, buscan “reconocer la trascendental labor desarrollada por la seguridad privada e impulsar la divulgación de su utilidad social, sensibilizando a la sociedad sobre su contribución a la mejora de la seguridad común como colaborador indiscutible de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”.